Una planta con flores comestibles

El Hibisco es una planta herbácea y perenne, que comprende unas 150 especies.

La especie más utilizada para las elaboraciones culinarias es la conocida por el nombre científico de Hibiscus sabdariffa y sus partes comestibles son sus flores, los brotes y las hojas.

La flor de hibisco también se la conoce como flor de Jamaica y pertenece al género Hibiscus y a la familia de las Malvaceae.

Sus flores de apariencia acampanada contienen 5 grandes pétalos comestibles de color rojo y su cáliz carnoso del mismo color que los pétalos es una de sus características de identidad.

Otra característica de su flor comestible es que brota individualmente de las axilas del tallo y únicamente están sujetas por unos pedicelos muy cortos.

La planta tiene un característico tallo de color rojizo que puede sobrepasar los 2 metros de altura.

Y tiene las hojas alternas de color verde intenso, son algo dentadas y de apariencia ovalada, pudiendo medir hasta 15 cm.

Las flores de hibisco se pueden consumir frescas, secas o cristalizadas.

Por su sabor afrutado y aroma floral esta flor comestible se puede consumir en crudo en elaboraciones tanto dulces como saladas y es mejor si se hace recién recolectadas.

Otras formas habituales de consumir la flor de Hibiscus sabdariffa es preparando una infusión  o añadida en refrescos y coctel a los que aporta un ligero color rojo y su característico aroma dulce.

Al añadir una pequeña cantidad de flores frescas de hibisco en nuestros platos, estaremos aportando una gran cantidad de vitaminas y sales minerales a nuestra salud..

Por su sabor afrutado con un toque ácido, la flor de hibisco se está incorporando con fuerza en la cocina creativa y no es difícil encontrar esta flor para comer en algunos platos de menús gourmet.

Es perfecta por aroma y sabor para incluirla en nuestras ensaladas y para la elaboración de quesadillas y para acompañar de unas tostadas de queso fresco, por la suavidad de su sabor.

El tamaño y color de la flor de hibisco nos permite utilizarla como guarnición o acompañamiento en platos cocinados con carnes de ave y pescados.

En la cocina y con las flores secas de hibisco, podemos realizar un sazonador vegetal de origen natural al moler los pétalos deshidratados hasta quedar en un polvo que mezclaremos con sal en el formato que más te guste, fina, en escamas o sal gorda.

Con este sazonador de flor de hibisco podrás realzar el sabor de tus platos, añadiendo un toque de color, acidez y aroma a tus elaboraciones de cremas, sopas, purés y estofados. quesos frescos o cualquiera de tus platos.

Los pétalos de la flor de Jamaica nos permiten muchas posibilidades de decoración en bizcochos y tartas por su gran tamaño, ya que posibilita decorarlas exteriormente con el pétalo entero y además servir como envase de relleno de quesos y cremas dulces.

Un toque decorativo en repostería y pastelería aportando su color y sabor característico, que también puedes añadir troceada en la masa de tus preparaciones, antes de hornear y también como ingrediente saludable en una ensalada de frutas.

Con los pétalos de hibisco podemos elaborar un delicioso almíbar, trabajándolo con agua y miel, además podemos disfrutar de todas sus propiedades y añadirlo en la elaboración de mermeladas, gelatinas y mousses.

Una buena forma de obtener todas las propiedades saludables, antioxidantes y diuréticas de la flor de Hibiscus sabdariffa es mediante su infusión.

Su preparación es sencilla y necesitarás cálices y flores deshidratadas de hibisco, un cazo y dejarlo hervir a fuego lento durante aproximadamente 15 minutos, bien tapado para conservar todo su aroma.

Una vez hayas colado los cálices e impurezas solo queda disfrutar de tu infusión natural conocida como agua de Jamaica y añadir algún edulcorante y si lo deseas medio vaso de limón recién exprimido por cada litro de la preparación.

La infusión de hibisco se consume preferiblemente fría y combinada con otras flores como la camomila nos ayuda a conciliar mejor el descanso.

La flor de Hibisco es muy apreciada por sus beneficios digestivos y por ayudar a combatir la acidez, el estreñimiento y a regular el tránsito intestinal.

Estas flores comestibles son apreciadas y muy utilizadas desde la antigüedad por las culturas asiática y africana como remedio natural por sus beneficios.

Gracias a sus beneficios, la flor de hibisco ayuda en nuestro rendimiento, alivia el agotamiento y nos permite conciliar mejor el sueño.

Entre sus otras propiedades beneficiosas, a la flor de hibisco se le atribuyen también las ventajas de regular ligeramente la tensión, poseer propiedades diuréticas y ser favorable con el control del colesterol.